Guía para comenzar a portear con una mochila ergonómica: Cuándo y cómo hacerlo de forma segura

¿Cuándo puedo empezar a portear con una mochila ergonómica?

Nuestra Asesora de Porteo del equipo Belly&Baby ha preparado una pequeña guía para una experiencia segura y cómoda.

Si es la primera vez que lees acerca del porteo, quiero contarte que ésta, es una práctica ancestral y que brinda numerosos beneficios tanto para los bebés como para lxs adutxs que portean.

Aunque en nuestras recomendaciones en las asesorías, desde recién nacido aconsejamos usar fular elástico o bandolera los primeros meses de vida, ya que nos brinda un recubrimiento “modo nubecita” que respeta la postura fisiológica al 100% y comodidad, pero la mochila evolutiva se está convirtiendo en el hit preferido de los nuevos nuevos ma/padres (sobre todo papás) que buscan la practicidad de “2 click’s” como lo llamamos nosotras para llevar a los bebés cerca mientras se realizan actividades diarias.

Sin embargo, es natural preguntarse cuándo es el momento adecuado para comenzar a utilizar una mochila ergonómica y evolutiva.

Exploremos algunos factores a considerar para garantizar un uso seguro y cómodo al portear a tu bebé.

El desarrollo físico del bebé:

Antes de comenzar a portear con una mochila evolutiva, es importante considerar el desarrollo físico del bebé y para eso te recomiendo ir a lo seguro y contratar a una asesora certificada.

En general podríamos decir que, se recomienda esperar hasta que el bebé tenga al menos 3 o 4 meses de edad. A esta edad, su cuello y espalda estarán lo suficientemente fuertes para mantener una postura adecuada dentro de la mochila. Si bien cada bebé se desarrolla a su propio ritmo, este es un punto de referencia útil para comenzar a explorar el porteo con mochila. Hay opciones en mochilas evolutivas que nos valdrían desde recién nacido (recuerda que, siempre valorando: tamaño, desarrollo, etc.) hasta los 3 años aprox. Lo cual es una inversión que nos saldría muy rentable a la larga.

Como ejemplo podemos nombrarte Neko Switch Baby que nos proporciona un fácil ajuste o una de mis preferidas Emeibaby que es un pelín más técnica, pero nos hace un ajuste “punto por punto” con lo cual podríamos usarla desde el día cero, en un bebé con un percentil medio. Pero como siempre os digo, recomendación por parte de la asesora para ir a lo seguro.

Postura ergonómica y soporte adecuado:

Las mochilas evolutivas están diseñadas para brindar una postura adecuada y un soporte óptimo para el bebé, respetando su necesidad fisiológica postural. Las evolutivas, siguen siendo la mejor opción como hemos dicho, porque la versatilidad que nos ofrece el poder reducir el panel de ancho y de largo, nos asegura al 100% estar respetando la postura que el bebé necesita. Además podemos distribuir el peso de manera equilibrada y proteger la columna vertebral en desarrollo del bebé, que debería dibujar una “C”. Hay sistemas como Neko Switch Baby en el que podemos ajustar el tirante al cinturón para que no cause presión en el panel y obligue a erguir la espalda al bebé y a partir de los 9 meses al año (dependiendo del desarrollo) podríamos ponerlo directo al panel, ya que el tono muscular de su espalda ya es suficiente para poder controlar mejor la postura.

Capacidad de sostener la cabeza:

Antes de comenzar a portear con una mochila ergonómica que NO SEA EVOLUTIVA, es fundamental que tu bebé tenga la capacidad de sostener su cabeza de manera independiente. Esto indica que sus músculos del cuello y la espalda están lo suficientemente fuertes para mantener una postura adecuada dentro de la mochila. Si el bebé aún no puede sostener su cabeza, puedes optar por otros tipos de portabebés que proporcionen un mayor soporte para el cuello y la cabeza, de los que hemos hablado anteriormente.

Comodidad y seguridad para ambos:

Al elegir el momento para empezar a portear con una mochila ergonómica, también debes tener en cuenta tu comodidad y seguridad como porteador. Asegúrate de que la mochila esté correctamente ajustada y se adapte a tu cuerpo de manera adecuada. Verifica que las correas sean lo suficientemente acolchadas y que la mochila distribuya el peso de manera equitativa en tus hombros y espalda. Practica con la mochila en casa antes de llevar a tu bebé para asegurarte de sentirte cómodo y seguro al portear o bien (mi recomendación siempre) acude a una asesora de porteo certificada, que te recomiende el sistema que mejor se adapta a tus necesidades.

En caso de que aún estés recuperando tu cesárea o te cause molestias el abdomen, sería cuestión de elegir una mochila evolutiva que pudieras portear a la cadera y liberar el espacio abdominal para no causar molestias o presión y en esta ocasión te recomendaría  KIBI o bien te decantes por una bandolera a la cadera, hasta que te recuperes y ya puedas portear delante con normalidad.

En conclusión, el momento adecuado para empezar a portear con una mochila ergonómica depende del desarrollo físico de tu bebé, su capacidad para mantener una postura adecuada y tu propia comodidad y seguridad como porteador. Sigue estas pautas y consulta con asesoras de porteo si tienes alguna duda o inquietud.

¡Disfruta de la maravillosa experiencia de portear a tu bebé con una mochila evolutiva y ergonómica!