¿Qué es el fular tejido o rígido?
El fular tejido o rígido, también llamado fular de tela, es un portabebés ideal para utilizar desde el primer día de vida del bebé, hasta el final del porteo.
Es un portabebé muy versátil y útil desde el nacimiento hasta los 3 o 4 años.
Ofrece múltiples posiciones para portear al bebé, como en la espalda, en la cadera o delante.
Su tejido resistente y sin elasticidad garantiza un buen soporte. Este artículo explicará las ventajas del fular tejido, las posiciones básicas para portear y cómo hacer los diferentes nudos.
Ventajas del fular tejido
El fular tejido es un portabebé que ofrece numerosos beneficios tanto para los padres como para el bebé, convirtiéndose en una opción ideal para distintas etapas de crecimiento.
Gracias a la forma de entrelazar el tejido, en sarga cruzada, Jacquard o sarga diamante, entre otras, se adaptan muy bien al bebé y al porteador.
Un beneficio destacable de este sistema es que el peso se reparte entre los dos hombros, de forma que está indicado para largas sesiones de porteo.
Soporte adecuado para diferentes etapas del bebé
El fular tejido es ideal para adaptarse al crecimiento del bebé, proporcionando el soporte y la seguridad necesarios en cada etapa de su desarrollo.
Desde el recién nacido hasta los 3 meses
Durante los primeros meses, es crucial que el fular proporcione un buen soporte para la cabeza y el cuello del bebé, que aún no tienen suficiente fuerza para mantenerse por sí solos. El ajuste correcto del fular tejido asegura que el bebé se mantenga en una posición ergonómica y cómoda.
El uso de nudos específicos para recién nacidos, que garantizan que el bebé esté bien sujeto y con una correcta alineación corporal, es fundamental en esta etapa.
De 3 a 12 meses
A medida que el bebé crece y desarrolla mayor control sobre su cabeza y cuello, el fular tejido sigue proporcionando un soporte óptimo, distribuyendo el peso de manera uniforme a lo largo del torso y la espalda del portador.
En esta etapa, los padres pueden experimentar con diferentes posiciones, como el porteo en la cadera o delante, para encontrar la más cómoda tanto para ellos como para el bebé.
A partir de los 12 meses
Cuando el bebé ya tiene un año, el fular tejido continúa ofreciendo soporte ajustable y seguridad, permitiendo a los padres portear al niño en la espalda, lo cual es muy conveniente y cómodo para llevar durante más tiempo y en diversas actividades.
El uso adecuado del fular tejido en esta etapa permite a los padres seguir disfrutando de la cercanía con su hijo mientras mantienen la libertad de movimiento y comodidad.
Otro punto a tener en cuenta es el hecho de que este tipo de fulares admiten una mayor movilidad del niño y un mayor contacto con el exterior, facilitando la recepción por parte del niño de estímulos externos y, por tanto, un más fácil conocimiento del entorno y más rápida adaptación al mismo.
Este tipo de porteo, por tanto, garantiza una correcta posición para el buen desarrollo de la anatomía del bebé, además de promover y mejorar el desarrollo emocional, cognitivo y motor.
Aunque en un principio puede parecer complicado utilizar este sistema de porteo, la colocación de los fulares tejidos es cuestión de práctica y rápidamente deja de ser un inconveniente. Es muy fácil aprender a usarlos gracias a las Asesoras de porteo, cursos, talleres, etc.
Factores importantes a tener en cuenta al elegir fular tejido:
- Ergonómico y adaptable 100% al bebé y al porteador.
- Muy resistente y ligero.
- Distribuye el peso del bebé entre cadera, espalda y hombros.
- Tiene varias posiciones de uso.
- Ideal para porteos más largos
- Recomendado para abarcar desde el nacimiento hasta una edad avanzada.
- Fácilmente lavable y secable.
Puntos Negativos del fular Tejido:
De todos los portabebés, probablemente los fulares tejidos sean los que más práctica y conocimiento necesiten. Tienen una gran cantidad de tela y debemos saber que hacer con ella.
Un buen portabebés tejido será menos económico que cualquier otro similar y es importante que en estos casos escojamos calidad sobre precio.
Inevitablemente van a ocupar más espacio que otros fulares. No es una desventaja como tal pero es un aspecto a tener en cuenta también.
Variedad de tejidos en los fulares portabebés
Existen infinidad de tejidos utilizados en estos fulares: algodón, gasa, tela orgánica, etc. y están pensados también para temperaturas más calurosas y que no se conviertan en un estorbo a la hora de portear.
Dominando los Nudos y Posiciones
Si bien es cierto que ofrecen una variedad amplia de posiciones y usos, también es necesario conocer diferentes tipos de nudos para ellos. No son tan simples como los elásticos pero ofrecen esa versatilidad que, una vez dominada, ofrece muchísimas ventajas.
Podemos encontrarlos en el mercado siempre categorizados en distintas medidas y tallas. Existen muchos tamaños y longitudes de tela y por lo general oscilan entre los 2.5 m y los 5 m (también los hay de mayor tamaño). Aun así con el mismo fular de este tipo, diferentes porteadores podrán llevar al bebé sin necesidad de adquirir más de uno, simplemente habrán de ajustarlo y anudarlo cada vez que cambie el porteador.
Facilitando la Experiencia de Porteo
Este tipo de porteo, por tanto, garantiza una correcta posición para el buen desarrollo de la anatomía del bebé, además de promover y mejorar el desarrollo emocional, cognitivo y motor.
Aunque en un principio puede parecer complicado utilizar este sistema de porteo, la colocación de los fulares tejidos es cuestión de práctica y rápidamente deja de ser un inconveniente. Es muy fácil aprender a usarlos gracias a las Asesoras de porteo, cursos, talleres, etc.
Elegir el Largo Adecuado
Elegid siempre el largo de fular que permita hacer la mayor cantidad de nudos a aquel cuidador que vaya a portar más a menudo. Nuestra experiencia nos dice que es la mamá. Si el papá es mucho más grande de tamaño, siempre puede aprender a hacer nudos de menos capas. Pero para la mamá es incómodo estar arrastrando siempre fular “de más”. Si luego se ve que realmente el papá portea tanto como la mamá, pues os podéis plantear comprar un fular más largo para él, u otro portabebé diferente para tener más opciones de porteo.
Probando y Aprendiendo: La Experiencia del Usuario
Si tienes posibilidad de probarlo, tocarlo y practicar con él antes de comprarlo, seguro que aciertas en tu elección. Nuestras asesoras te ofrecen la oportunidad de poder probar y aprender a utilizarlos, en nuestros talleres de porteo o contratando una asesoría, pide más información en este enlace.
Posiciones básicas para portear
El fular tejido permite llevar al bebé en diversas posiciones, ofreciendo versatilidad y comodidad tanto para el porteador como para el bebé.
Porteo en la espalda
El porteo en la espalda es ideal para bebés que ya tienen control sobre su cabeza y tronco, generalmente a partir de los seis meses. Esta posición permite al porteador llevar al bebé cómodamente mientras distribuye el peso de manera uniforme, lo que es especialmente útil para largos periodos.
Para portear en la espalda, es crucial asegurar bien el fular para garantizar la seguridad del bebé. Se pueden usar diferentes nudos, como el nudo doble hamaca o el nudo canguro a la espalda, que ayudan a distribuir el peso y mantener al bebé en una postura ergonómica.
Porteo en la cadera
El porteo en la cadera es una excelente opción para bebés que pueden sentarse sin ayuda, generalmente a partir de los seis meses. Esta posición permite un contacto visual constante con el bebé, lo que facilita la interacción y la comunicación.
Para portear en la cadera, es importante que el fular esté bien ajustado y que el bebé esté sentado en una posición ergonómica, con las rodillas más altas que las nalgas y la espalda bien apoyada. El nudo ideal para esta posición es el nudo de cadera simple, que es fácil de hacer y ajustar.
Porteo delante
El porteo delante es adecuado desde el nacimiento, ofreciendo al recién nacido la cercanía y el contacto directo con el porteador. Esta posición es especialmente recomendada en los primeros meses de vida, ayudando a fortalecer el vínculo afectivo.
Existen varios nudos que se pueden utilizar para el porteo delante. Algunos de los más comunes son el nudo cruz envolvente y el nudo canguro delante. Estos nudos proporcionan el soporte necesario para la delicada espalda del recién nacido y aseguran que el bebé esté en una posición ergonómica y segura.
Cómo hacer los diferentes nudos
Dominar los nudos del fular tejido es esencial para garantizar la comodidad y seguridad tanto para el bebé como para los padres. Existen varios tipos de nudos, desde los más básicos hasta los más avanzados y especializados.
Nudo básico para principiantes
Explicación paso a paso
El nudo básico es ideal para quienes recién empiezan a usar el fular tejido.
- Extiende el fular y colócalo en tu cuerpo de manera que el centro quede en tu abdomen.
- Cruza las puntas del fular por tu espalda y llévalas hacia adelante sobre tus hombros.
- Ajusta la tela para que quede bien sujeta y cómoda sobre tus hombros.
- Coloca al bebé en el asiento creado por el cruce del fular, asegurándote de que las piernas queden en forma de “M”.
- Cruza las puntas del fular nuevamente sobre el bebé y llévalas hacia la espalda.
- Anuda las puntas del fular con un doble nudo en tu espalda o a un lado.
Beneficios del nudo básico
Este nudo es sencillo y proporciona una base segura para empezar a portear. Proporciona una buena distribución del peso y es fácil de ajustar. Es una excelente opción para sesiones cortas de porteo o para quienes busca comodidad sin complicaciones.
Nudos avanzados para mayor soporte
Nudo doble hamaca
El nudo doble hamaca ofrece un soporte excepcional, ideal para llevar al bebé durante periodos prolongados. Para realizarlo:
- Extiende el fular y, al igual que en el nudo básico, colócalo en tu cuerpo.
- Cruza las puntas en tu espalda y llévalas hacia adelante, creando un asiento profundo para el bebé.
- Coloca al bebé en el asiento y ajusta las bandas de tela para que cubran bien su espalda.
- Cruza las puntas del fular una vez más frente al bebé y pásalas hacia atrás.
- Anuda las puntas en tu espalda, asegurándote de que el nudo quede firme.
Nudo cruz envolvente
El nudo cruz envolvente es otra opción avanzada que brinda un excelente soporte y comodidad. A continuación, se muestra cómo hacerlo:
- Comienza colocando el fular en tu cuerpo con el centro en tu abdomen.
- Cruza las puntas detrás de tu espalda y llévalas hacia adelante sobre tus hombros, creando un cruce en la espalda.
- Coloca al bebé en el cruce del fular sobre tu pecho.
- Envuelve una punta del fular alrededor de la espalda del bebé y pásala hacia adelante.
- Repite el proceso con la otra punta del fular.
- Anuda las puntas en tu espalda o a un lado, ajustando para asegurar la comodidad del bebé.
Nudos específicos para situaciones especiales
Nudo para lactancia
Estructura un nudo adecuado para lactar al bebé, permitiendo un fácil acceso y comodidad tanto para la madre como para el bebé. Aquí tienes los pasos:
- Coloca el centro del fular en tu abdomen y pasa las puntas por tus hombros y hacia atrás.
- Anuda las puntas en tu espalda sin apretar demasiado.
- Coloca al bebé en posición de lactancia y ajusta el cruce del fular para que su cabeza quede bien apoyada.
- Afloja el nudo o reajusta según sea necesario para mayor comodidad.
Nudo para recién nacidos
El nudo para recién nacidos debe proporcionar soporte adecuado desde la cabeza hasta los pies. Siga estos pasos para realizarlo:
- Ubica el centro del fular en tu pecho y crúzalo por tu espalda.
- Pasa las puntas por tus hombros y nuevamente crúzalas frente a tu abdomen.
- Coloca al bebé sobre tu pecho, asegurándote de que el fular lo cubra completamente.
- Cruza las puntas del fular sobre el bebé y pásalas hacia atrás.
- Anuda las puntas firmemente en tu espalda.
¿Qué es mejor, fular elástico o rígido?
Diferencias entre fulares tejidos y fulares elásticos
Los fulares tejidos y los fulares elásticos se distinguen principalmente por el tipo de tejido y la forma de ajuste al cuerpo del bebé.
A diferencia de los fulares elásticos, los fulares tejidos no poseen elasticidad en ninguna dirección, aunque sí pueden estirarse ligeramente de manera diagonal, proporcionando un soporte más firme.
Los fulares elásticos, por su composición, pueden aflojarse con el tiempo y uso prolongado, mientras que los tejidos mantienen su forma y resistencia durante más tiempo. Esto los hace más adecuados para portear a niños mayores, que requieren un soporte extra.
Otro aspecto diferencial es que los fulares tejidos son versátiles y pueden adaptarse a diversas posiciones y necesidades, desde el nacimiento hasta los 3 o 4 años, dependiendo del tipo de tejido y su resistencia.
Consejos de seguridad y comodidad al utilizar un fular tejido.
Es fundamental seguir una serie de consejos para asegurar tanto la seguridad como la comodidad del bebé y del porteador.
Ajuste correcto de la tela
Lograr el ajuste correcto de la tela es crucial para un porteo seguro y cómodo.
Cómo asegurar bien las piernas del bebé
Para asegurar bien las piernas del bebé, es vital que éstas estén en una posición correcta, formando una “M”. Esto significa que las rodillas deben estar a la altura o ligeramente por encima de las caderas, con los muslos bien apoyados por la tela del fular. La tela debe pasar por debajo de las rodillas del bebé para asegurar la correcta sujeción y prevenir cualquier incomodidad.
Distribución del peso del bebé
La distribución adecuada del peso del bebé es crucial para evitar esfuerzos innecesarios al porteador y proporcionar comodidad al bebé. La tela del fular debe estar bien estirada y ajustada en todas las direcciones para repartir el peso uniformemente. Asegúrate de que la tela pase por los hombros y la espalda de forma tal que el peso no recaiga en un solo punto.
Recomendaciones de seguridad
Seguir ciertas recomendaciones de seguridad es esencial para minimizar cualquier riesgo potencial durante el porteo.
Posiciones seguras para dormir
Cuando el bebé duerme en el fular, es vital que mantenga una posición segura. La cabeza y las vías respiratorias deben estar siempre despejadas. La barbilla del bebé no debe tocar su pecho para prevenir dificultades respiratorias. Además, se debe poder ver la carita del bebé a cualquier momento, y la tela no debe cubrir su rostro.
Precauciones durante el paseo
- Vigila constantemente al bebé mientras esté en el fular.
- Evita actividades que impliquen mucho movimiento o riesgo de caída.
- Asegúrate de que el bebé esté protegido del sol, el viento y los cambios de temperatura.
- Verifica regularmente el ajuste del fular para asegurarte de que todo esté en su lugar y correctamente tensado.
Preguntas Frecuentes
Esta sección aborda las preguntas más comunes sobre el uso del fular tejido, orientando a los padres en aspectos prácticos y técnicos.
¿Qué tipo de fular es mejor?
- La elección del mejor tipo de fular depende de las necesidades y preferencias individuales. Los fulares elásticos son ideales para recién nacidos y principiantes, ya que son más fáciles de ajustar y ofrecen un ajuste cómodo. Los fulares tejidos son más versátiles y duraderos, adecuados para usar desde recién nacidos hasta niños más grandes. Para aquellos que buscan una opción rápida y fácil de usar, las bandoleras son una excelente alternativa.
¿Cuántos metros de tela lleva un fular?
La longitud de un fular puede variar, pero generalmente los fulares tejidos están disponibles en varias tallas que van desde los 2.5 metros hasta los 5.2 metros. La longitud adecuada depende de la talla del portador y del tipo de nudo que se desee realizar. Para la mayoría de los adultos, un fular de entre 4.2 y 5.2 metros es suficiente para la mayoría de los nudos.
¿Cuántos tipos de fular hay?
Existen varios tipos de fulares para cargar bebés:
- Fulares elásticos: Perfectos para recién nacidos y fáciles de usar para principiantes.
- Fulares tejidos: Versátiles y duraderos, adecuados para todas las edades.
- Bandoleras: Fáciles y rápidas de poner, ideales para periodos cortos de porteo.
- Mei Tai y Meichila: Combinan lo mejor de los fulares y las mochilas portabebés.
- Portamuñecos: Versiones en miniatura para que los niños porten a sus juguetes.
Para iniciar el proceso de devolución podrás hacerlo poniéndote en contacto con nosotros en hola@bellybaby.es o por WhatsApp al 641743749.
¿Cómo se llama la tela que usan para cargar a los bebés?
La tela utilizada para cargar a los bebés se llama generalmente fular o rebozo. Dependiendo del país y la cultura, puede haber diferentes términos, pero todos se refieren a una tela especialmente diseñada para portar a los bebés de manera segura y cómoda.
¿Cuál es el tamaño ideal del fular para mi bebé?
El tamaño del fular tejido depende tanto de la complexión del adulto que portea como del tipo de nudos que se deseen realizar. A continuación, se detallan algunas recomendaciones básicas:
- Fulares cortos (2,5-3,2 metros): ideales para nudos más sencillos y rápidos de hacer, como el nudo de cadera.
- Fulares medianos (3,6-4,2 metros): adecuados para nudos tradicionales y algunas variaciones en la forma de porteo delante y en la cadera.
- Fulares largos (4,6-5,2 metros): permiten realizar nudos más complejos y de mayor soporte, como el nudo cruz envolvente o el nudo doble hamaca.
Es importante tener en cuenta la talla del porteador. Un adulto de talla pequeña a mediana puede manejar bien un fular de tamaño mediano, mientras que alguien con una talla mayor puede necesitar un fular más largo.
¿Cuánto tiempo puedo llevar a mi bebé en el fular cada vez?
La duración del tiempo de porteo puede variar en función de varios factores, como la comodidad del bebé, la posición y el tipo de nudo utilizado. Algunas pautas generales que se pueden seguir son:
- Recién nacidos: se puede portear durante periodos de tiempo más prolongados siempre que el bebé esté cómodo, bien ajustado y en una posición ergonómica. Es importante asegurarse de que el bebé tenga una buena sujeción de la cabeza y el cuello.
- Bebés mayores de 3 meses: a medida que los músculos del bebé se desarrollan, se puede incrementar gradualmente el tiempo de porteo. Las pausas frecuentes son recomendables para permitir que tanto el bebé como el porteador descansen.
- Niños a partir de 12 meses: el tiempo de porteo dependerá más de las actividades del día y las necesidades del niño. El porteo puede realizarse durante caminatas, siestas y otras actividades cotidianas, siempre prestando atención a la comodidad y descanso de ambos.
Es fundamental estar atentos a las señales del bebé y del propio cuerpo. Si tanto el bebé como el porteador se encuentran cómodos y seguros, el porteo puede ser una experiencia placentera y beneficiosa durante largos periodos de tiempo.
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